Tras el bautizo de su hijo, Luis Miguel y Aracely Arámbula fueron captados al salir de un restaurante en Beverly Hills, y se vio al cantante muy alegre y hasta sonrió a la cámaras, en contraste a otras veces donde ha ordenado a su seguridad que eviten a los paparazzis.Luis Miguel iba vestido con una gorra y camisa negra, al igual que su pareja Aracely, que en contraste a él, evitaba que la cámara la tomara de frente, a pesar de que iba bien maquillada y con ropa deportiva.Existen versiones que el nacimiento de su hijo y la reconciliación con su hija Michelle Salas, han provocado que el cantante se encuentre de mejor humor, lo que sin duda alguna expresó ante estas últimas fotos que lo captaron con Aracely Arámbula.
HispaLab
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